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Tu lees porque piensas que te escribo... Eso es entendible. Yo escribo porque pienso que me lees... Y eso es algo terrible.

28 octubre 2007

CARTAS QUE NUNCA...(7)

La verdad, es que no te pierdes nada por no estar aqui conmigo;
Atenas esta en ruinas.
Piedras y mas piedras destruidas por el paso del tiempo.
Cuesta creer que esta ciudad fue alguna vez la cuna de la civilización. Ya que sus habitantes son de todo, menos civilizados. La gente camina con la cabeza baja y jamas alzan la mirada si no es para retarse o para vociferar el nombre del destino deseado a algun taxi, que a su vez, suele responder con un gesto de desprecio si ese destino no le pilla de paso.
Las carreteras estan llenas de coches que intentan sortearse los unos a los otros haciendo caso omiso de las normas de circulacion y pequeñas manadas de perros sin dueño merodean las calles principales.
En su mayoria, es una ciudad descuidada y los años parecen haberla convertido más en vieja que en antigüa.
Y sin embargo, me siento a gusto en ella.
Desordenada, caotica, parece como si la ciudad careciera de autoestima. En seguida te das cuenta que es una ciudad que tan solo sobrevive de viejos recuerdos y viejos fantasmas.
No es extraño que me sienta bien aquí, esta ciudad parece mi reflejo.
Disfruto deambulando por sus calles, me gusta repetir una y otra vez los mismos paseos. Desde el primer día que llegué, subo una y otra vez a a la Acrópolis a ver de cerca donde pusieron los viejos filósofos sus pies. Pero nunca entro. Es una cuestión de respeto; No quiero molestar a más fantasmas. Bastantes tengo ya con los que viven en mi interior.
Tan solo subo para observar la ciudad desde arriba, también suelo fijarme en un pequeño puesto donde una bruja de las de antes, de bola de cristal y pañuelo en la cabeza, ofrece en un cartón escrito en varios idiomas "Soluciones para todo".
Nunca lo he comprobado, ya sabes que yo no creo en estas cosas, tan solo la observo de lejos y veo como habla con los turistas. Aunque he de confesar que muchas veces me he sentido tentado a acercarme y averiguar... ¿Y si fuera verdad? ¿Y si supiera ella una manera eficaz de sacarte de mi cabeza?

Hoy no sé porque la vieja no ha dejado de mirarme, (¿Quizás he estado pensando en voz alta?).
Cuando ya había decidido marcharme, me ha hecho gestos para que me acercase. A regañadientes,y de forma desconfiada, me he aproximado a ver que quería, y como premio he obtenido una frase en un, increíblemente, casi perfecto español (aquí la gente habla un mal ingles y algunos un pésimo italiano, pero nadie conoce nuestra lengua):

-Se porque vienes siempre por aqui; Estas triste y no puedes olvidar.Pero eso tiene solución-

En ese momento, intente borrar la expresion de asombro (o sea, de tonto) de mi cara y le conteste, que se equivocaba, pero que es normal los extranjeros que hablan español suelen confundir los verbos auxiliares; Y que yo no "estaba" triste. Yo "era" triste.
La bruja farfulló algo en griego que no consegui entender, después de nuevo en español, me dijo que no se equivocaba, y que sabía porque "estaba" triste, mientras ponía un énfasis en el verbo me hacía una mueca de burla. Me aseguró que no debia preocuparme, que lo mío tiene solución.
No me he molestado en contestarla. Yo ya se que eso es imposible.

-No es tan dificil olvidarla- continuaba diciendo. -Mírame a los ojos, ¿Que ves en ellos? -
-Lo mismo que voy a pagarte por esto; ¡Nada!-Conteste

-Exacto-, me replico ella, pasando por alto completamente mi comentario sobre sus honorarios, -¡Nada! En mis viejos ojos no está. Pero si miras bien en los ojos, no en los míos, en otros ojos... veras eso que tanto echas de menos y descubriras la manera de no hacerlo-

Ojos, ¿Que tendrán que ver los ojos de nadie con los tuyos? ¿Y que tendrán que ver tus ojos con que yo no pueda olvidarte? Tus ojos son solo una mínima parte de todo lo que echo de menos de ti. Suena algo macabro, pero podrías volver sin ellos, y mi felicidad no los echaría ni lo más mínimo en falta. Pero por otro lado,ya me conoces, le doy mil vueltas a la cabeza y a pesar de ser un escéptico incurable, tengo la enorme contradicción de ser a la vez un ingenuo y que por muy inverosímil que sea la historia, si es lo que quiero creer; ya puede ser un hilo frágil y a punto de romperse que yo me agarro a él pensado que puede sujetar todo mi cuerpo mas tres mochilas cargadas de piedras.
Así que he salido de ahí mirando a los ojos de la gente fijamente, buscando esos ojos, dueños de la formula que me va hacer olvidar.Pero han pasado los días y poco a poco me he ido olvidando de esta obsesión y el hilo que me parecía una robusta soga, va volviendo a su ser; un estupido y fragil hilo que apenas sirve para sujetar un botón.Y me han dado ganas de volver allá arriba y decirle a la vieja:
"Lo ves" "Todo es mentira" "No eres más que un fraude".

Pero no vale la pena, y he decidido que ha llegado el momento de irse de esta ciudad.
Y he salido rumbo al aeropuerto, libre de mi nueva obsesión de mirar fijamente los ojos de todo el que me cruzaba, pero entonces he notado como unos ojos se clavaban profundamente en mi, igual que un cuchillo en una manzana.
No creo que esto sea nada extraño, imagino que a ti y a todo el mundo, ha debido pasarle alguna vez, el darse cuenta que a uno lo estan mirando, sin la necesidad de verlo directamente.
Así que me he girado intentando adivinar de donde provenia esa penetrante mirada. He acertado a la primera; Y ahi estaban esos ojos fijos en mi. Ojos que me han parecido fríos y, tal vez, duros pero que mostraban, sin lugar a dudas, un brillo de interés. Aunque eso en realidad no importa, ya que esos ojos pertenecian a una cara y la cara a un cuerpo y ese cuerpo iba del brazo de otro hombre, indicando claramente que el conjunto en su totalidad le pertenecía.
Cuando he intentado devolver la mirada, sus ojos rápidamente se han apartado de mí. Eran ojos verdes, ojos grandes y expresivos que ya no me miraban. Eran ojos... Ojos como los tuyos.

Y en ese momento no he tenido otra que maldecir la bruja. Imagino que esta es la solución que me proponía para olvidarte. Para conseguirlo no tengo más que enamorarme de esos ojos que "pertenecen" a otro y no a mi, ojos, que sin duda, no van a responderme... unos ojos, que al igual que los tuyos, nunca más van a amarme.